***
ACABO DE LEER:
Las encantadas, de Herman Melville (1819-1891). Artemisa Ediciones, 2006.
‘Pensad en veinticinco montones de ceniza diseminados, aquí y allá, por un solar de las afueras de la ciudad; imaginad que algunos son tan grandes como montañas y que el descampado es el mar, y tendréis una idea exacta de la apariencia general de Las Encantadas…’.
Así comienza el primero de los diez capítulos —que el autor llama cuadros—, que dedica Melville a diez de las islas del archipiélago volcánico de las Galápagos.
La muerte de Melville, uno de los autores más importantes del siglo XIX, pasó desapercibida, aunque en vida alcanzara la fama como escritor. Además de por otras obras, es mundialmente conocido por su novela Moby Dick y el relato Bartleby, el escribiente. Hemos tratado de su obra en mi artículo 'LA LITERATURA Y LAS ISLAS’.
Los amantes de la literatura de viajes, de la fauna y de la flora, encontrarán gratificante leer estos diez relatos escritos con mano maestra por el autor en el año 1854 para la revista neoyorquina Putnam’s Monthly Magazine, dedicados a islas que inicialmente tuvieron nombres españoles (Isabela y Fernandina, entre otros).
Llama la atención que Melville no mencione ni de pasada la visita prolongada que en 1835 realizó Charles Darwin a las Galápagos, que revolucionó los cimientos de la ciencia con El origen de las especies, estudio que realizó a partir de trece especies de pinzones de las islas, conocidos desde entonces como los pinzones de Darwin. La única explicación plausible es que Melville no diera importancia relevante, si los conocía, a los estudios darwinianos, que no fueron aceptados científicamente hasta cuarenta años más tarde.
Otro de los grandes escritores norteamericanos del siglo XIX, Robert Louis Stevenson (La isla del tesoro, El extraño caso del Dr. Jekyll y Mr.Hide, entre otras obras) dijo de Melville: ‘Sólo conozco a dos escritores que hayan tratado los Mares del Sur con cierta fortuna y ambos son norteamericanos: Melville y Charles Warren. Y Melville es el primero y mejor.’.
El libro de relatos Las encantadas está escrito por un autor ya clásico, que nos regala una prosa fresca, lúcida, de calidad narrativa, aguda en las descripciones y rica en la profundidad sicológica de los personajes.
Es extraño que a los veinte años de su muerte se conociera a Melville todavía como el ‘cronista del mar’.
***
HE EMPEZADO A LEER:
Una vez Argentina, de Andrés Neuman. Editorial Anagrama, 2004.
Ya os contaré.
***
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire